lunes, 23 de marzo de 2015

CONCIERTO ABONO A-9 ORQUESTA CIUDAD DE GRANADA VIERNES 27 MARZO 2015


Auditorio Manuel de Falla, 20:30 h
viernes 27 marzo 2015

ABONO A9

Johannes BRAHMS

Réquiem alemán, op. 45

Coro de la Orquesta Ciudad de Granada

Isabel Monar soprano

José Antonio López barítono

SALVADOR MAS director

Salvador-Mas



EIN DEUTSCHES REQUIEM / UN RÉQUIEM ALEMÁN

"El réquiem ateo". Con esta desafortunada expresión ha sido designado, en alguna ocasión, el opus 45 de Johannes Brahms, el pretexto del escaso número de veces que en su texto se menciona a Dios, al menos, directamente. Sin embargo, pocas obras en la historia de la música clásica aparecen tan impregnadas de espiritualidad, no sólo en lo que al texto atañe, sino también en lo que a la propia música concierne. El hecho de que Brahms designase esta magna obra como "ein deutsches Requiem", o más exactamente, "eine Art deutsches Requiem (una especie de réquiem alemán)" obedece al propósito de configurarla como una composición de índole exclusivamente musical, y ajena, por tanto, a la celebración litúrgica, a pesar de que Réquiem es, precisamente, la palabra con la que da comienzo el Introitus de la misa de difuntos de la Iglesia Católica, y que, en el ámbito musical, ha dado origen a numerosas obras de carácter religioso de la mano
de Ockeghem, Lassus, Morales, Palestrina, Cavalli, Scarlatti, Mozart, Cherubini, Berlioz, Liszt, Verdi, Dvorák o Fauré.
 
Dos fueron los acontecimientos que impulsaron a Brahms a componer su réquiem: el fallecimiento, en el verano de 1856, de su amigo Robert Schumann (quien, paradójicamente, también tuvo el propósito de componer una obra con idéntico título) y la muerte de su propia madre en febrero del año 1865.
 El día que Brahms y Schumann se conocieron ,en Septiembre de 1853, el segundo anotó en su diario: "Brahms ha venido a verme, es un genio".
 
Los primeros compases de la obra fueron escritos por Brahms en 1856, y su conclusión se prolongó, prácticamente, hasta poco antes de su estreno, en la catedral de Bremen, el Viernes Santo del año 1868. El texto fue elegido por el propio compositor a partir de las traducciones luteranas del Antiguo y Nuevo Testamento.  
El Réquiem alemán está dividido en siete partes y fue compuesto para: soprano, barítono, coro mixto, órgano y orquesta sinfónica.
 

I.-                                                                                     
Selig sind, die da Leid tragen,
denn sie sollen getröstet werden.
(Matthäus 5.4)

Die mit Tränen säen,
werden mit Freuden ernten.
Sie gehen hin und weinen
und tragen edlen Samen
und kommen mit Freuden
und bringen ihre Garben.
(Psalm 126, 5 und 6)


II.- 
Denn alles Fleisch, 
es ist wie Gras
und alle Herrlichkeit des Menschen
wie des Grases Blumen.
Das Gras ist verdorret
und die Blume abgefallen.
(1. Petrus 1, 24)

So seid nun geduldig, liebe Brüder,
bis auf die Zukunft des Herrn.
Siehe, ein Achermann wartet
auf die köstliche Frucht der Erde
und ist geduldig darüber,
bis er empfahe den Morgenregen
und Abendregen.
So seid geduldig.
(Jakobus 5, 7)

Denn alles Fleisch, 
es ist wie Gras
und alle Herrlichkeit des Menschen
wie des Grases Blumen.
Das Gras ist verdorret
und die Blume abgefallen.
Aber des Herrn Wort 
bleibet in Ewigkeit.
(1. Petrus 1, 24 und 25)

Die Erlöseten des Herrn
werden wiederkommen
und gen Zion kommen mit Jauchzen;
Freude, ewige Freude,
wird über ihrem Haupte sein;
Freude und Wonne 
werden sie ergreifen,
und Schmerz und Seufzen 
wird weg müssen.
(Jesaja 35, 10)


III.-
Herr, lehre doch mich,
daß ein Ende mit mir haben muß
und mein Leben ein Ziel hat
und ich davon muß.
Siehe, meine Tage sind
einer Hand breit vor Dir,
und mein Leben ist wie 
nichts vor Dir.

Ach, 
wie gar nichts sind alle Menschen,
die doch so sicher leben.
Sie gehen daher wie ein Schemen
und machen ihnen viel 
vergebliche Unruhe;
sie sammeln und wissen nicht,
wer es kriegen wird.
Nun Herr, 
wess soll ich mich trösten?
Ich hoffe auf Dich.
(Psalm 39, 5-8)

Der Gerechten Seelen 
sind in Gottes Hand
und keine Qual rühret sie an.
(Weisheit Salomos 3, 1)


IV.-
Wie lieblich sind Deine Wohnungen,
Herr Zebaoth!
Meine Seele verlanget 
und sehnet sich
nach den Vorhöfen des Herrn;
Mein Leib und Seele freuen sich
in dem lebendigen Gott.
Wohl denen, 
die in Deinem Hause wohnen,
die loben Dich immerdar.
(Psalm 84, 2, 3 und 5)


V.-
Ihr habt nun Traurigkeit;
aber ich will euch wiedersehen,
und euer Herz soll sich freuen,
und eure Freude soll niemand 
von euch nemmen.
(Johannes 16, 22)

Ich will euch trösten,
wie einen seine Mutter tröstet.
(Jesaja 66, 13)

Sehet mich an: 
Ich habe eine kleine Zeit
Mühe und Arbeit gehabt
und habe großen Trost gefunden.
(Jesus Sirach 51, 35)


VI.-
Denn wir haben hie 
keine bleibende Statt,
sondern die zukunftige suchen wir.
(Hebräer 13, 14)

Siehe, ich sage euch ein Geheimnis:
Wir werden nicht alle entschlafen,
wir werden aber alle 
verwandelt werden;
und dasselbige plötzlich 
in einem Augenblick
zu der Zeit der letzten Posaune.
Denn es wird die Posaune schallen,
und die Toten werden 
auferstehen unverweslich;
und wir werden verwandelt werden.
Dann wird erfüllet werden das Wort,
das geschrieben steht:
Der Tod ist verschlungen 
in den Sieg.
Tod, wo ist dein Stachel!
Hölle, wo ist dein Sieg!
(Korinther 15, 51 und 52, 
54 und 55)

Herr, Du bist würdig
zu nehmen Preis un Ehre und Kraft,
denn Du hast alle Dinge erschaffen,
und durch Deinen Willen 
haben sie das Wesen
und sind geschlaffen.
(Offenbarung Johannes 4, 11)


VII.-
Selig sind die Toten,
Die in dem Herrn sterben,
von nun an.
Ja, der Geist spricht,
daß sie ruhen von ihrer Arbeit;
denn ihre Werke folgen ihnen nach.
(Offenbarung Johannes 14, 13)



I.-
Bienaventurados los que padecen,
pues ellos serán consolados.
(Mateo 5.4)

Los que siembran con lágrimas,
recogerán con alegría.
Se han ido y lloran,
y portan la noble simiente,
y retornan con júbilo,
y traen sus gavillas.
(Salmo 125, 5 y 6)


II.-
Entonces toda la carne,
es como la hierba
y todo el esplendor del hombre 
es como la flor de los prados.
La hierba está seca 
y la flor está marchita.
(Primera epístola de S. Pedro 1, 24)

Así, amados hermanos, sed pacientes
y esperad la venida del Señor.
Mirad al campesino que aguarda
el fruto precioso de la tierra
y espera paciente
la llegada de la lluvia
del otoño y la primavera.
Así, sed pacientes.
(Epístola de Santiago 5, 7)

Entonces toda la carne,
es como la hierba
y todo el esplendor del hombre
es como la flor de los prados.
La hierba está seca
y la flor está marchita.
Pero la palabra del Señor 
perdura eternamente.
(Primera epístola S. Pedro 1,24,25)

Los que han de ser salvados 
por el Señor retornarán
y vendrán jubilosos hacia Sión;
La alegría, la alegría eterna,
reinará sobre ellos.
La alegría y el gozo 
se apoderarán de ellos,
y el dolor y el llanto 
desaparecerán.
(Isaias 35, 10)


III.-
Revélame, por tanto, Señor,
que mis días deben tener un final,
que mi vida tiene un destino
y que me debo a él.
¡Mira!, en tu presencia, mis días son
como la palma de tu mano,
y mi vida, ante ti, 
no es nada.

¡Ah!, 
todos los hombres son apenas nada
y, sin embargo, 
viven tan seguros.
Desaparecen como una sombra
y en vano se agitan;
Acumulan riquezas sin saber
a quién aprovecharán.
Y ahora Señor, 
¿qué podrá consolarme?
En ti deposito mi esperanza.
(Salmo 38, 5-8)

Las almas de los justos 
están en las manos del Señor
y ninguna pena podrá perturbarlas.
(Sabiduría 3, 1)


IV.-
Qué dulces son tus moradas,
¡Señor de los ejércitos!.
Mi alma se desespera
y suspira
por las cortes celestiales;
Mi cuerpo y mi alma 
se alegran del Dios vivo.
Bienaventurados 
los que habitan tus moradas,
que te alaban por siempre.
(Salmo 83, 2, 3 y 5)


V.-
Ahora estáis afligidos;
Pero yo os volveré a ver,
vuestro corazón se regocijará
y nada podrá privaros 
de vuestro gozo.
(San Juan 16, 22-23a)

Os consolaré,
como una madre consuela a su hijo.
(Isaias 66, 13)

Mírame: 
Qué escaso tiempo de fatigas
y trabajos he vivido
y he hallado un gran consuelo.
(Siracide o Eclesiástico 51, 27)


VI.- 
Pues no tenemos en la tierra 
una morada permanente,
por ello buscamos la del porvenir.
(Epístola a los hebreos 13, 14)

Mirad, que os revelo un secreto:
ciertamente, no moriremos todos,
pero todos seremos transformados;
En un instante, 
en un abrir y cerrar de ojos, 
a los acordes de la última trompeta.
Puesto que se escuchará la trompeta
y los muertos 
resucitarán incorruptos;
Y nosotros seremos transformados.
Entonces se cumplirá lo escrito:
la muerte quedará cautiva 
en la victoria.
Muerte, 
¿dónde está tu espina?
Infiernos, 
¿dónde está vuestra victoria?
(Primera epístola a los Corintios
15, 51 y 52, 54 y 55)

Señor, Tú eres digno
de recibir alabanza, honor y poder,
porque Tú eres el creador 
de todas las cosas,
y por tu voluntad 
son y han sido creadas.
(Apocalipsis 4, 11)


VII.-
Bienaventurados los muertos
que mueren en el Señor.
Sí, 
el espíritu dice
que reposa de sus fatigas,
porque sus obras van tras él.
(Apocalipsis 14, 13)


HASTA PRONTO.-






domingo, 22 de marzo de 2015

BRAHMS Y EL REINVENTO DE LA MÚSICA DE BRAHMS POR ARNOLD SCHOENBERG




La Orquesta Ciudad de Granada junto con La Joven Academia Instrumental dirigidos por el magisterio de José Luis Estellés, nos hicieron pasar una velada muy dinámica, oyendo trocitos de sus sinfonías, oberturas  festivas y académicas, danzas Hungaras y en definitiva células identificativas del idioma del genial de Johannes Brahms, terminando el concierto con un final feliz..

Imaginaros que en una butaca del Auditorio Manuel de Falla  está sentado el anciano Johannes Brahms, con su gran humanidad,  vestimenta de su época, con aspecto desaliñado, con melena barba blanca, con ojos desorbitados por la sorpresa escuchando el Cuarteto con piano en Sol menor, op. 25 De carácter tan  intimista, que compuso allá por su juventud, interpretado por una gran orquesta con armonías y timbres extraños, producidos por instrumentos, como el corno inglés el clarinete bajo, el contra fagot  desconocidos por él, trompas y trompetas con sordinas, sabiendo que está en otro siglo, una percusión: bombo platillos triangulo caja xilófono etcétera se preguntaría ¿quien ha hecho esto con mi música?

 En el último párrafo del programa de mano:” Pero aún queda una pregunta por resolver: la de si es más meritorio innovar sin romper con los procedimientos tradicionales o hacer tabula rasa con el pasado”, Creo que la respuesta es  fácil,  las dos opciones son  validas. La estructura formal  compositiva, de su música y su periodo a la que corresponde como es el romanticismo, produce una nostalgia indescriptible, pero también  la evolución, para bien o para mal, es irremediable.

Volviendo al Concierto quedo sorprendido del sonido propio de la Orquesta que no lo pierde con la inclusión de jóvenes músicos con una calidad y saber encomiable, debido a la mayor parte a la labor artística de proyecto pedagógico  de José Luis Estellés clarinetista y director de orquesta, que tiene en su haber un  bagaje nacional e internacional muy reconocido.

En definitiva un sabor de boca muy bueno con una buena satisfacción.

Hasta pronto.-

viernes, 13 de marzo de 2015

CONCIERTO DE ABONO A-8 ORQUESTA CIUDAD DE GRANADA AUDITORIO MANUEL DE FALLA VIERNES 20 MARZO 2015



Viernes 20 marzo 2015
Auditorio Manuel de Falla

ABONO A8

Johannes BRAHMS
Concierto para violín y violoncello en La menor, op. 102,


Cuarteto con piano en Sol menor op. 25 (arr. Arnold Schoenberg)

Pablo Martos violín
Alberto Martos violoncello


Joven Academia Instrumental de la OCG
(Taller orquestal OCG-Real Academia de Bellas Artes de Granada)


JOSÉ LUÍS ESTELLÉS director


José Luis Estellés


Doble concierto en la menor, op. 102, concierto para violín, cello y orquesta escrito en el verano de 1887 estrenado en octubre del mismo año, es el último trabajo para orquesta  de Brahms, dedicado su viejo amigo, el violinista Joseph JOACHIM, en gesto de reconciliación hacia él, luego de que su larga relación se viera afectada por el divorcio del violinista y su esposa Amelie. Brahms había tomado partido por ella, lo cual afectó la relación de los músicos.

El tandem que estrenó el concierto, Joachim y el chelista Hausmann, repitiéndolo varias veces en la temporada 1887-88, siempre con Brahms en el podio. El compositor luego entregó el manuscrito a Joachim con la inscripción "para aquel por quien fue compuesto".

La pieza está dividida en tres movimientos de la forma rápido-lento-rápido típica de los conciertos:

     I.        Allegro
   II.        Andante
  III.        Vivace non troppo
 
 
 

Si Brahms hubiese tenido conocimiento de que otro compositor remodelaría su Cuarteto como obra orquestal tantos años después de su creación (1861), no saldría de su asombro. No tenía aún 30 años cuando compuso esta obra y Schönberg tenía 73 cuando decidió orquestar esta pieza que se estrenó en el 105 aniversario del nacimiento de Brahms (7 de mayo de 1938).
 
Compositor conservador del siglo XIX, a Brahms también le hubiese sorprendido el empleo por Schönberg del corno ingés o el xilófono, entre otros, que Brahms no utilizó nunca en sus obras orquestales. Schönberg fue el innovador del siglo XX y el creador de método dodecafónico de composición.
 
La obra de Brahms es una pieza de cámara íntima, execepto por el final abierto, en tanto que la orquesta de Schönberg es grande y poco propicia para la expresión íntima. Esta obra se ha convertido en una pieza llana de colores para grandes orquestas y en un estímulo, algo exhibicionista, para quienes la dirigen. Toda su profundiddad proviene esencialmente de la obra original.
 
El mayor homenaje que se pudo hacer a Brahms; No convertir un cuarteto en una sinfonía sino quedarse a medio camino, como el propio Brahms lo hizo en sus serenatas. Amén, aleluya.

 
 Sus movimientos son los siguientes:
!.-Allegro  II.- Intermezzo- Allegro ma non troppo III.-Andante con moto  IV.- Rondó alla zingarese





OTRA OPINIÓN POSITIVA:

El resultado es espectacular, y obtuvo un gran éxito cuando fue estrenada por el propio Klemperer con la Orquesta Filarmónica de Los Ángeles. ¡Es Brahms, puro Brahms!, pero con la instrumentación de una orquesta moderna, con profusión de instrumentos, una cuerda muy nutrida, maderas triples... Una delicia. Se comenta que el director musical de la Orquesta angelina le confesó a Klemperer... "No sé por qué dicen que Schönberg no sabe hacer melodías... Esto era muuy melódico...". Normal; lo que nos preguntábamos todos los que asistimos a ese concierto al que me refería antes era: "Y si Schönberg sabía componer de esta forma... ¿por qué demonios componía de esa otra?".

He aquí el primer movimiento: Allegro:
Es un movimiento con multitud de temas, quizá demasiados para una obra de cámara, pero que se suceden uno al otro de forma tan natural que casi parece siempre el mismo. El caso es que se adapta perfectamente a una obra orquestal... u orquestada, como es el caso. Sus poco más de doce minutos son realmente puro Brahms (nada de Schönberg, gracias a Dios); a mí me recuerda bastante al primer movimiento de su Primera Sinfonía... Son trece minutos realmente fantásticos.

El segundo movimiento, Intermezzo (Intermedio, obviamente).
Con ocho minutos y pico, se trata de un movimiento tranquilo, amable y muy, muy pegadizo, diseñado por Brahms para poner un punto de relajación antes de resolver las tensiones planteadas en el Allegro inicial. Eso dice el texto de mi disco , aunque no sé muy bien a qué tensiones se refiere. En fin. El caso es que es un intermedio que se deja oír bien... muy bien.

El tercer movimiento es un Andante con moto-Animato... pero con muchísimo "moto". Por momentos parece una marcha militar, de tanto "moto" (movimiento) que tiene. Y animado... un rato animado. Realmente es un movimiento estupendo, variado y con muchísimo ritmo. Sus casi once minutos se hacen cortos. Comienza como un movimiento lento "de los de toda la vida", más bien un Adagio que un Andante, que me recuerda bastante al movimiento lento de la Tercera Sinfonía... Pero en el minuto 2,55
cambia el ritmo abruptamente, y aparece una cantinela machacona que rápidamente se convierte casi en una marcha militar, una marcha militar con mucho moto como bien se puede oír. Los toques del metal (trompetas y trompas), que obviamente no están en el Cuarteto original, dan un toque marcial al movimiento que casi te dan ganas de salir a desfilar por el pasillo... Casi. Luego te lo piensas mejor y te quedas escuchando el resto del movimiento, que es más sensato y enriquecedor.

Esta tónica "marchosa", con diferentes variaciones, culmina en el minuto 6:05
con una vuelta al tranquilo tema inicial, que se desarrolla de forma muy "brahmsiana" hasta que el tema se va desvaneciendo lentamente hasta el silencio.
Y el movimiento termina... pero es que hay que dejar paso al momento más célebre de la obra, el movimiento final: Rondo alla zingarese (Rondó a la zíngara, o sea, con aires gitanos). Las obras más conocidas de Johannes Brahms son seguramente sus Danzas Húngaras, de clara ascendencia gitana... los que hayáis estado en Hungría os habréis dado cuenta de que la música zíngara está por doquier. En la calle, en los restaurantes, en el metro, en el teatro... los violinistas zíngaros os atacan en cualquier lado con sus coloridos trajes y sus alegres ritmos... y luego pasan la gorra, claro. Pues este movimiento es auténticamente zíngaro: alegre, rápido, lleno de solos improvisatorios... un lujo, vaya. Podemos imaginarnos, casi vemos al violinista solista vestido con su pantalón negro, camisa blanca, chaqueta roja y lazo negro ejecutando sus acordes imposibles acompañado de sus cuatro o cinco colegas de la banda... el ritmo ora es lento y bailable, ora melancólico, ora rapidísimo... Zíngaro, vaya.

En fin: nueve minutos deliciosos, pero deliciosos de verdad. Y pegadizos... un rato pegadizos. ¡Llevo una semana escuchando este estupendo movimiento zíngaro, sin poder quitármelo de la cabeza! Disfrutadlo.
 

MI OPINIÓN.-


No soy partidario de los arreglos de obras maestras el proceso creador en la música lo hacen los compositores originales, que son los genios,con su propio lenguaje, sus melodías, ritmos, armonías y sus timbres, los ingredientes necesarios que no deben apropiarse de otros.

Prefiero escuchar las obras de música de Johannes Brahms, sus Sinfonías y Danzas Húngaras. Inserto el cuarteto con piano, objeto de la inspiración de Schoenberg.-
 
Brahms : Piano Quartet No. 1 in G minor, op. 25 
 
 
HASTA PRONTO