martes, 19 de noviembre de 2013

CONCIERTO SINFÓNICO Nº 5 ORQUESTA CIUDAD DE GRANADA VIERNES 22 NOVIEMBRE 2013



ABONO A (5)
XIX Encuentros Manuel de Falla

Carl REINECKE
Octeto para vientos, op 216 


Claude DEBUSSY     
Sarabande (orquestación de Maurice Ravel)


Gustav MAHLER      
Adagietto  para cuerdas y arpa


Max REGER            
Serenade para orquesta en Sol mayor, op 95 


RICARDO CASERO director 

Programación OCG – Archivo Manuel de Falla


Carl Reinecke (1824 – 1910)  Empezó a aprender música de su padre y como joven hizo carrera como pianista, especializándose en la obra de Mozart para teclado. También destacó como director de orquesta, al frente de la Orquesta del Gewandhaus de Leipzig, puesto que dejó cuando se lo disputó el célebre Artur Nikisch. Pero siempre se dedicó también a la composición, en cuyo campo fue un prolífico creador de toda clase de obras, óperas incluidas. Se dedicó también con ahínco a la música de cámara y dos de sus obras, para sexteto y octeto de vientos, op 271 y op 216, respectivamente,ésta ultima figura al inicio del programa. Reinecke fue un sucesor de Mendelssohn y Schumann, y también tuvo alguna influencia de Wagner y Brahms. En sus obras de la madurez también se oyen atisbos del tipo de post-romanticismo como lo iba a desarrollar Richard Strauss.


Carl REINECKE
Octeto para vientos, op 216


I.- Allegro moderato 6,16
II- Scherzo Vivace    2,49
III-Adagio ma non troppo 5,03
IV-Finale Allegro molto e grazioso 4,22

Enlace     http://www.classicalplanet.com/auditorium/view/auditoriumPlayer.xhtml?trackId=5021-7062


Claude DEBUSSY (1862-1918)

 Nació el 22 de agosto de 1862 en Saint-Germain-en-Laye (Francia).

Cursó estudios desde los 10 años, en el Conservatorio de París con Lavignac y Marmontel. En 1879 se trasladó a Florencia, Venecia, Viena y Moscú como músico privado de Nadejda von Meck, mecenas del compositor ruso Piotr Ilich Chaikovski.

Ganó en 1884 el codiciado Grand Prix de Roma por su cantata El hijo pródigo. Estudió en Roma instalado en la villa Medici durante dos años y presentó nuevas composiciones al comité del Grand Prix. Entre estas obras se encuentran la suite sinfónica Printemps y una cantata, 'La señorita elegída', basada en el poema 'La doncella bienaventurada' del escritor británico Dante Rossetti.

Entre sus obras más importantes cabe destacar el Cuarteto en sol menor (1893) y el Preludio a la siesta de un fauno (1894), basada en un poema del escritor simbolista Stéphane Mallarmé. Su ópera Peleas y Melisanda, basada en la obra teatral del mismo nombre del poeta belga Maurice de Maeterlinck, data de 1902 y le otorgó el reconocimiento como músico de prestigio.

Hasta 1920 se dedicó casi exclusivamente a componer obras para piano. De su producción de este periodo destacan Estampas (1903), L'île joyeuse (1904), Imágenes (dos series, 1905 y 1907) y varios preludios.

En 1917 dio su último recital público.

Claude Debussy falleció en París el 25 de marzo de 1918 a causa de un cáncer.





Claude DEBUSSY     
Sarabande (orquestación de Maurice Ravel)






Gustav MAHLER      
Adagietto  para cuerdas y arpa





Max REGER   Fuente WikipediA
 
Johann Baptist Joseph Maximilian Reger1873 - Leipzig1916), fue un compositor, organista, pianista y profesor alemán.
 
Nacido en Brand, Baviera, Reger estudió música en Múnich y Wiesbaden con Hugo Riemann. En 1901 se instaló en Múnich, donde de dedicó a la enseñanza del órgano y composición, y desde el 1907, trabajó en Leipzig, donde fue director musical de la universidad hasta 1908 y profesor de composición en el Conservatorio Felix Mendelssohn hasta su muerte. Entre sus alumnos hay que destacar a Joseph Haas y a George Szell.
También tuvo una intensa actividad como director de orquesta y pianista.
Desde 1911 dirigió la orquesta de la Corte de Meiningen hasta que fue disuelta en 1914, momento en que se trasladó a Jena.
Murió finalmente de infarto de miocardio en Leipzig.


Durante una vida creativa de poco más de 20 años, Reger produjo una gran cantidad de obras en todos los géneros (con la excepción de la ópera), casi siempre usando formas abstractas, aunque muy pocas de ellas son conocidas hoy en día.
Muchas de sus obras son en forma de fuga o variaciones, incluyendo la que probablemente es su obra más popular: Variaciones y Fuga sobre un tema de Mozart (basada en el tema inicial de la Sonata para piano, K. 331 de Wolfgang Amadeus Mozart. También dejó una gran cantidad de obras para órgano, incluyendo la Fantasía y fuga sobre BACH (esta pieza, basada en el Motivo BACH se considera una de las más difíciles del repertorio del instrumento). Se sintió particularmente atraído para la forma fugada durante toda su vida, incluso declarando: "Otros componen Fugas - Yo vivo en ellas.
Fue un firme abanderado de la música absoluta, y se veía a sí mismo como parte de la tradición musical de Ludwig van Beethoven y Johannes Brahms.
Su obra combina a menudo las estructuras clásicas de estos compositores con las armonías extendidas de Franz Liszt y Richard Wagner y el complejo contrapunto de Johann Sebastian Bach.
Su música para órgano, también influida por Liszt, es hija de esta tradición. De sus obras orquestales, las ricamente elaboradas Variaciones Hiller y las Variaciones Mozart son las más rememoradas; de la música de cámara los ligeramente texturados tríos se han hecho un hueco en el repertorio, junto con algunas obras para instrumentos de cuerda.
Sus últimas obras para piano, o dos pianos, le sitúan como sucesor de Brahms en la tradición musical germánica.
No se puede decir que sus obras fueran revolucionarias, ya que pueden ser consideradas como una consecuencia del desarrollo de las formas clásicas, como la fuga y el bajo continuo. La influencia de este último puede escucharse en las obras de cámara que son profundamente reflexivas y originales..

No encuentro la obra.
 Hasta pronto.-








sábado, 9 de noviembre de 2013

DESAFORTUNADA INTERPRETACIÓN.-




La programación del concierto de anoche en el Auditorio Manuel de Falla de las tres obras  bellísimas, geniales composiciones, Idilio de Sigfrido pequeño poema musical de Richard Wagner, Concierto para piano y orquesta núm.2 en Fa menor de Frédéric  Chopin , y  la Sinfonía  núm. 41 en Do mayor “Júpiter”, fueron masacradas en él sentido interpretativo, por el director de turno Joseph SWENSEN, que tiene que tener claro lo que quiere conseguir en su pensamiento de cómo concibe la obras y después transmitirlo a la orquesta que va a dirigir.

  Existe un sentimiento que  debe ser inculcado  en los ensayos previos,  el resultado final  que se quiere conseguir, en base a la forma musical, estructura y género, “LA EXPRESIÓN “que no brilló por su  ausencia. 

Tampoco se tuvo  en cuenta la administración de  tempos, color  textura, y lo que es peor desajuste  total entre las distintas familias, las cuerdas eran tapadas por falta de potencia por los tutti de las maderas, metales y percusión en los diálogos establecidos por la composición.

En cuanto al pianista solista inglés polaco  Mateusz  BOROWiAK, muy joven,  su actuación no fue brillante pero digna, nada pudo hacer ante el desastre de la velada.

Las comparaciones son odiosas, pero si se visiona las versiones que he colgado de YouTube de las tres obras de duración más extensa en tiempo, (por esa dichosa velocidad de ejecución), podrán apreciar expresión, en las dos obras románticas, tanto en el poema musical amoroso a su esposa Cosina  de Wagner, como la belleza del piano de Chopin en su concierto núm. 2, o la sinfonía clásica  de Mozart, el contrapunto tan hermoso, la sordinas de las cuerdas, con que maestría maneja una célula pequeña para montar el desarrollo de los motivos temáticos. 
 
Hasta pronto.-

DESASTROSO EVENTO EN KINEPOLI CON MUY MALA ACÚSTICA DE LA SALA QUE NO CORRIGIERON.-





Decepcionante Les Vépres  Siciliennes de Guiseppe  VERDI, en directo representado en la ROYAL OPERA HOUSE de Londres.

Salí desilusionado  de la sala de proyección  Kinepolis el pasado lunes día 4. Acudía yo con ganas, por ser la primera vez que visitaba éste centro y por asistir a un evento de categoría  dirigido por su titular Antonio Pappano, gran pedagogo, gran conocedor de la ópera italiana. Pero no: la decepción fue grande pese a que hubo cosas, que me gustaron las menos, y otras la mayoría  no.

 Una fue precisamente la dirección teatral de los cantantes, otra el vestuario, se puede decir que fueron dignos.
La puesta  en escena del sueco Stephan Herthelm, ridícula y fuera de lugar. Una concepción  imaginativa, que explicó al comienzo de la retransmisión, fuera de lugar con la época  y argumento ideados por el libretista  y el compositor. 

El lirismo de las voces con falta de expresión, fraseo  y dramatismo, con timbres poco adecuados y con falta extensión para interpretar, sin fraseo  belcantista, como requiere la obra.

En cuanto a la dirección musical  de Antonio Pappano  un director que alberga mucho talento para determinados repertorios, pero en ésta ocasión su batuta adoleció de falta de enfoque, produciendo una música plana inexpresiva  y de textura. 

MIGUEL TALAVERA HDEZ.

Hasta pronto.-


miércoles, 6 de noviembre de 2013

CONCIERTO SIFÓNICO Nº 4 ORQUESTA CIUDAD DE GRANADA VIERNES 8 NOVIEMBRE 2013.-


AUDITORIO MANUEL DE FALLA

ABONO A (4)

Richard WAGNER              
Idilio de Sigfrido 


Frédéric CHOPIN               
Concierto para piano n. 2 en Fa menor


Wolfgang Amadeus MOZART
Sinfonía núm. 41 en Do mayor, KV 551, “Júpiter” 


Mateusz Borowiak piano

JOSEPH SWENSEN director


Adjunto enlaces de entradas, en Marzo 2013, celebrando en 200 aniversario del nacimiento de Richard Wagner.


http://wwwmigueltalavera.blogspot.com.es/2013/03/entrando-en-el-mundo-de-richard-wagner.html


http://wwwmigueltalavera.blogspot.com.es/2013/03/la-otra-opera-el-drama-musical-de.html


Aparte de las óperas, Wagner compuso un pequeño número de piezas; Esto se deriva de su renuencia a concebir la música que no pertenece a la sacralidad del drama, expresión fundamental de su pensamiento.
El "idilio de Sigfrido" es un poema sinfónico para orquesta de cámara, compuesta por Richard Wagner (1813-1883) como un regalo de cumpleaños para su segunda esposa, Cosima, después del nacimiento de su hijo Siegfried en 1869. Fue estrenada en la mañana de Navidad, 25 de diciembre de 1870, por un pequeño conjunto en las escaleras de su villa en Tribschen.
Ópera de Wagner "Siegfried", que se estrenó en 1876, incorpora la música del idilio. Una vez se pensó que el idilio prestadas ideas musicales destinados a la ópera, pero ahora se sabe que el contrario es el caso: Wagner adaptado material melódico de una pieza de cámara inacabada en el idilio e incorporó más tarde a la escena de amor entre Sigfrido y Brunilda en la ópera.





FUENTE WIKIPEDIA
 
Concierto para piano y orquesta n.º 2 en fa menor, Op. 21 de es uno de los dos conciertos para piano del compositor polaco. Pese a haberse publicado en segundo lugar, en realidad es anterior al Concierto para y orquesta nº1 Op. 11 en mi menor. Está dedicado a la condesa Delphine Potocka. Se terminó al final del invierno de 1829 y fue estrenado por el propio compositor al piano el 17 de marzo de 1830 en Varsovia. Es, en conjunto, de acentos más dramáticos que el Concierto en mi menor. Con todo, es una maravillosa inspiración melódica, riqueza de expresividades románticas y sentido rítmico.
Los efectivos orquestales son maderas a dos, dos trompas, dos trompetas un trombón, timbales y cuerdas.   Uno de sus mejores intérpretes ha sido el pianista polaco Arthur Rubinstein.


El concierto está estructurado en tres movimientos:

  1. Maestoso. Escrito en forma sonata. Es una amplia introducción orquestal que expone los dos temas principales. El primero de ellos es de suave hermosura, con un fraseo amplio y lírico; el segundo es íntimo, desarrollado por el solista. Cuando tras un fortissimo el piano irrumpe con brillantez, ya no dejará su puesto privilegiado: éste será el que lleve el protagonismo en todo el movimiento.
  1. Larghetto. Intimista y amoroso, fue inspirado por un amor de juventud de Chopin, la soprano Konstancia Gladkowska. Tiene estructura tripartita, con las secciones extremas plenas de efluvios amorosos, mientras que la central tiene un contrastado sentido dramático. La línea cantabile está adornada en una escritura a veces lánguida y otras de indudable contemplación erótica.



  1. Allegro vivace. Escrito en forma de rondó, este tiempo final consta de dos temas principales: el primero está dotado de sencillez y encanto, mientras que el segundo es prácticamente una mazurca de claro sabor polaco. El piano juega con ambos temas, en un clima desenfadado y muy luminoso acompañado por una orquesta en la que domina la cuerda. La última sección está escrito a moto perpetuo.

  2. Wolfgang A. Mozart: Sinfonía nº 41 en Do mayor KV 551 "Júpiter
Ésta se inicia con un aire habitual en la tradición de las sinfonías ceremoniales en Do mayor, con brillantes intervenciones de trompetas y timbales. Sin embargo, esta aparente formalidad exterior se ve contrastada de inmediato por una dulce frase lírica de las cuerdas, una oposición que domina todo el primer movimiento. La grandeza es agitada, constantemente socavada por momentos de intimidad, drama, o humor subversivo…

Por otra parte, la inquietud también marca el Andante, donde trompetas y timbales se silencian y las cuerdas suenan en sordina. Un fraseo irregular, las modulaciones en claves remotas y disonancias cromáticas inquietantes contribuyen a dar un universo de complejas emociones que apenas podría presagiarse en las inocentes frases del inicio del movimiento.

El tempo del Menuetto y el trío es el de la tradicional danza cortesana, pero el denso carácter de la música resuelto con discretos pasajes contrapuntísticos los eleva mucho más allá del simple carácter de una danza de corte.

El final es el punto cúlmine del amor de Mozart por el contrapunto: en él combina la energía y el “momentum” de un allegro de sonata con los más intrincados recursos contrapuntísticos. Los cinco temas que contiene (algunos insinuados al principio de la sinfonía) aparecen en diferentes formas, y la coda termina en una sorprendente combinación de los todos ellos, un final glorioso para la producción sinfónica de Mozart. 

No se sabe con certeza quién le dio a esta sinfonía el nombre de Júpiter; quizás fue Johann Peter Salomon, el violinista y empresario que invitó a Haydn a Londres en los años de 1790. Es un extraño caso de adecuado apodo musical, porque la última sinfonía de Mozart tiene algo astronómico en su perfección.



Hasta pronto.-

sábado, 2 de noviembre de 2013

GIANCARLO ANDRETTA, DIRIGE A LA ORQUESTA CIUDAD DE GRANADA





Sorprendente dirección  de Giancarlo  Andretta  de la Orquesta Ciudad de Granada, en la ejecución de las dos últimas sinfonías de Robert Schumann .

 La estrella de la noche en el Auditorio Manuel de falla, indiscutible fue él. La teatralidad demostrada en su mímica gestual tan expresiva, condujo a una  interpretación correcta  de  estas obras de composición genial.

Desde el primer acorde demostró su profesionalización, en su curriculum consta que ha participado en muchas producciones operísticas, en obras vocales  acompañadas de instrumentación, pues su experiencia  como pianista repetidor en ensayos, más  tarde como profesor de dirección en distintos centros de enseñanza, impartiendo numerosas clases magistrales  titular de varios teatros de operas, han contribuido  a la manera de dirigir marcando el  compás con su mano derecha  en su justa medida, dando entrada a las distintas familias de instrumentos con dedos de su mano izquierda, usando gestualmente todo su cuerpo y añadiendo su sonrisa sus labios y boca para marcar los lances y figuración musical  de la obra, haciendo participes de optimismo, solemnidad, tristeza etcétera  según   las circunstancias,  a todos los profesores de la Orquesta.



Ésta apreciación  es visualizada por los oyentes que tienen posiciones de frente  al director, como la sala B, plateas y algunas posiciones de la sala A, es uno de los alicientes importantes que tenemos los melómanos para el disfrute, que acompaña a la audición.

Una velada muy interesante, una  Orquesta en su nivel, con un equilibrio en todas sus familias de instrumentación, pues las obras sinfónicas interpretadas tan densas en armonía,  dan para el lucimiento de las cuerdas y maderas con disonancias bellas de los metales, trompas, trompetas y  trombones, siendo premiados con cálidos y largos aplausos finales. 

Gracias, Andrea MARCÓN, director artístico de nuestra  Orquesta por  traer a sus amigos desde que comenzó la temporada a Granada.-

Hasta pronto.-