A propósito la programación
del Teatro Real de Madrid, con la puesta en escena de la ópera El Holandés
Errante de Richard Wagner, estas navidades, con iniciación wagneriana del
director musical granadino Pablo Heras Casado.
Como wagneriano edito una semblanza a la obra
genial de éste gran compositor que revolucionó el teatro musical en el siglo
XIX.
Seguro que conocéis la leyenda
del Holandés Errante. Es la historia del barco maldito, que se ve pasar en
medio de la tormenta con las velas
desplegadas y de vez en cuando echa al agua a un bote para entregar a los barcos
que encuentra todo tipo de cartas dirigidas a personas que han muerto hace
mucho tiempo. Ese espectro de madera, ese barco espeluznante toma su nombre de
un capitán un holandés que un día juró por todos los diablos, que habría de
circunnavegar un determinado cabo, aunque hubiera de estar navegando hasta el
juicio final. El diablo le tomó la palabra y habrá de vagar por los mares, a
menos que sea redimido gracias a la fidelidad de una mujer. Solo se le permite
atracar en tierra cada siete años y
perseguir su salvación. (Heinrich Heine).-
El Holandés Errante o El buque
fantasma la primera ópera romántica con
música y libreto en alemán de Richard WAGNER (1813-1883). Es el primer drama
musical romántico que marcó su estilo definitivo en sus posteriores obras. Dos
elementos característicos, marcan su música el leitmotifs (literalmente, “motivos lideres”)
asociados con los personajes y los temas y el otro con sus dramaturgias
románticas con temas de leyendas celticas de los pueblos del norte de Europa, “El
anillo del Nibelungo” épicos medievales con sentido cristiano religioso
“Parsifal” El Caballero del Cisne “Lohegrin”, obsesión por la redención a
través del amor “el Holandés Errante”, leyendas alamanas , entre el amor
sagrado y profano y la redención por
medio del amor carnal “Tannhauser”, “Tristán e Isolda” morir para alcanzar la
plena felicidad un drama musical de una máxima expresión estética, etc. Bellas obras
dramatúrgicas musicales, revolución operística que cambió el estilo y forma de
las óperas del siglo XX, con la célebre frase antes de Wagner y después de
Wagner.
Inserto dos versiones de dicha
ópera, para los que puedan estar interesados, la visionen y juzguen y comparen con la versión ofrecida por el Teatro Real de Madrid emitida por la red social
facebook en directo.
Franz Joseph Haydn, conocido simplemente como Joseph Haydn fue un compositor austriaco. Es uno de los máximos representantes del periodo clásico, además de ser conocido como el «padre de la sinfonía»
Estuvo al servicio de los
príncipes de Esterházy -primero Paul Anton y poco después, a la muerte de éste,
su hermano Nikolaus- lo tomaron a su servicio. Haydn tenía a su disposición una
de las mejores orquestas de Europa, para la que escribió la mayor parte de sus
obras orquestales, operísticas y religiosas.
El fallecimiento en
1790 del príncipe Nikolaus y la decisión de su sucesor, Paul Anton, de disolver
la orquesta de la corte motivó que Haydn, aun sin abandonar su cargo de maestro
de capilla, instalara su residencia en Viena. Ese año, y por mediación del
empresario Johann Peter Salomon, el músico realizó su primer viaje a Londres,
al que siguió en 1794 un segundo. En la capital británica, además de dar a
conocer sus doce últimas sinfonías, tuvo ocasión de escuchar los oratorios de
Haendel, cuya impronta es perceptible en su propia aproximación al género con La
Creación y Las estaciones.
Fallecido Paul Anton
ese mismo año de 1794, el nuevo príncipe de Esterházy, Nikolaus, lo reclamó de
nuevo a su servicio, y para él escribió sus seis últimas misas, entre las
cuales destacan las conocidas como Misa Nelson y Misa María Teresa.
Los últimos años de su existencia vivió en Viena, entre el reconocimiento y el
respeto de todo el mundo musical.
La aportación de Haydn
fue trascendental en un momento en que se asistía a la aparición y
consolidación de las grandes formas instrumentales. Precisamente gracias a él,
dos de esas formas más importantes, la sinfonía y el cuarteto de cuerda,
adoptaron el esquema en cuatro movimientos que hasta el siglo XX las ha
caracterizado y definido, con uno primero estructurado según una forma sonata
basada en la exposición y el desarrollo de dos temas melódicos, al que seguían
otro lento en forma de aria, un minueto y un rondó conclusivo.
No es, pues, de
extrañar que Haydn haya sido considerado el padre de la sinfonía y del cuarteto
de cuerda: aunque ambas formas existían como tales con anterioridad, por
ejemplo entre los músicos de la llamada Escuela de Mannheim, fue él quien les
dio una coherencia y un sentido que superaban el puro divertimento galante del
período anterior. Si trascendental fue su papel en este sentido, no menor fue
el que tuvo en el campo de la instrumentación, donde sus numerosos hallazgos
contribuyeron decisivamente a ampliar las posibilidades técnicas de la orquesta
sinfónica moderna.
Franz Joseph Haydn
(31 de marzo de 1732 - 31 de mayo de 1809)
- Orquesta: Collegium Musicum
90
- Director: Richard Hickox
- Solistas: Mark Padmore
(tenor), Stephen Varcoe (bajo), Pamela Helen Stephen (mezzo soprano), Susan
Gritton (soprano)
Misa para solistas, coro,
órgano y orquesta en re menor ("Lord Nelson"), H. 22/11, escrito en
1798.
00:00 - 1. Kyrie
04:29 - 2. Gloria
15:07 - 3. Credo
24:30 - 4. Sanctus
26:59 - 5. Benedictus
32:59 - 6. Agnus Dei
En los primeros días de agosto
de 1798, el almirante británico Lord Nelson atacó la flota de Napoleón en la
bahía de Aboukir, cerca de la desembocadura del río Nilo. La victoria de Nelson
en lo que se conoció como la Batalla del Nilo fue un gran avance en la batalla contra
los franceses. Las noticias de él viajaron rápidamente, y Nelson se convirtió
en un héroe celebrado.
En la corte de Esterházy,
Franz Josef Haydn estaba dando los últimos toques a su misa en re menor, la
tercera de las seis misas que escribió durante los años 1796 a 1802 para
conmemorar el nombramiento de la princesa María Hermenegild, la esposa de su
príncipe Patrón Nikolaus II Esterházy. Haydn ya había tomado nota de la guerra
contra Napoleón en su Misa en Tiempo de Guerra (1796), y también hay alusiones
a la lucha en la Misa en Re menor - la única misa de Haydn en modo menor - cuyo
título original, "Missa in angustiis", puede traducirse como Misa en
Tiempo de Dificultad o Ansiedad. La noticia de la victoria de Nelson
probablemente había llegado a Esterháza en el momento de la primera actuación
de la misa, bajo la dirección de Haydn, el 23 de septiembre de 1798; En
septiembre de 1800, el propio almirante Nelson visitó Eisenstadt en su viaje de
regreso a Londres. Mientras estaba allí, escuchó una actuación de la misa en modo menor, que por ese punto estaba firmemente asociada con él - de ahí el apodo
que ha llegado hasta nosotros.
- El ambiente de guerra es
evidente en el Kyrie de apertura, especialmente la dureza de su trompeta y
fanfarrones de timbales.
- La celebración de Gloria que
sigue evoca la figura de Handel, con cuya música Haydn se había familiarizado
bien durante sus años en Londres a principios de la década de 1790.
- En el corazón de la Gloria,
en el que el bajo solista está apoyado por el coro y la suave decoración del
órgano (probablemente interpretada por Haydn mismo en el estreno de la obra).
- El Credo comienza
tradicionalmente con una vieja melodía de la iglesia cantada polifónicamente
por el coro. A continuación, se mueve en un ravissante Et incarnatus para el
solista de la soprano, el oscurecimiento habitual de humor como el texto se
refiere a la crucifixión, y, por último, un brillo del espíritu en el Et
resurrexit.
- Sigue un breve, restringido
Sanctus.
- El portentoso Benedictus
domina la segunda mitad de la misa; La ira del martilleo de las trompetas y
timbales hacia su final es uno de los pasajes más feroces de toda la música de
Haydn.
- El estado de ánimo cambia
con Agnus Dei para los solistas vocales, y el coro toma el relevo de Dona Nobis
Pacem, que concluye el trabajo.
Nelson-Messe Missa en Angustiis (Misa por tiempos difíciles) Lord Nelson Misa en re menor HobXXII No 11 Grete Pedersen conduce Oslo Camerata / Det Norske Blåseensemble y Solistkor Oslo Berit Norbakken Solset - soprano; Halvor F. Melien - Barítono Otros solistas: Ingeborg Dalheim - soprano; Amanda Flodin / Astrid Sandvand Dahlen - alto; Mathias Gillebo / Kristian Krokslett-tenor; Olle Holmgren - bajo